Valencia: Estado de oxidación: Electronegatividad: Radio covalente (Å): Radio iónico (Å): Radio atómico (Å): Configuración electrónica: Primer potencial de ionización (eV): Masa atómica (g/mol): Densidad (g/ml): Punto de ebullición (ºC): Punto de fusión (ºC): Descubridor:
El calcio es un elemento químico de símbolo Ca y número atómico 20. Es un metal alcalinotérreo, blando, de color plateado y muy reactivo. Se encuentra en la naturaleza formando parte de diversos minerales, como el carbonato de calcio, el fosfato de calcio o el yeso. El calcio tiene varias propiedades químicas que lo hacen importante para la vida y la industria. Algunas de estas propiedades son:
- Es el quinto elemento más abundante en la corteza terrestre y el más abundante entre los metales.
- Tiene una gran afinidad por el oxígeno y forma óxidos estables que se usan como materiales de construcción, como la cal o el cemento.
- Reacciona con el agua y libera hidrógeno, formando hidróxido de calcio, una base fuerte que se usa para neutralizar ácidos y como agente alcalinizante.
- Forma compuestos con otros elementos, como el cloro, el azufre o el carbono, que tienen diversas aplicaciones industriales y domésticas, como el cloruro de calcio (desecante y anticongelante), el sulfato de calcio (yeso y aljez) o el carbonato de calcio (mármol y creta).
- Tiene una alta capacidad de formar enlaces covalentes con otros átomos, especialmente con el carbono, lo que le permite participar en numerosas reacciones bioquímicas y formar parte de moléculas orgánicas complejas, como las proteínas, los lípidos o los ácidos nucleicos.
El calcio es un elemento esencial para la salud humana y animal, ya que cumple funciones vitales en el organismo. Algunas de estas funciones son:
- Es el principal constituyente de los huesos y los dientes, donde se almacena en forma de fosfato de calcio cristalino, dando resistencia y rigidez al esqueleto.
- Interviene en la contracción muscular, ya que regula la entrada y salida de iones calcio en las células musculares, permitiendo la interacción entre las proteínas actina y miosina que generan el movimiento.
- Participa en la transmisión nerviosa, ya que modula la liberación de neurotransmisores en las sinapsis entre las neuronas, facilitando la comunicación entre ellas.
- Actúa como cofactor enzimático, activando o inhibiendo la acción de diversas enzimas que catalizan reacciones metabólicas importantes, como la coagulación sanguínea, la respiración celular o la síntesis de ADN.
- Regula el equilibrio ácido-base y electrolítico del organismo, manteniendo los niveles adecuados de pH y de iones en los fluidos corporales.
El calcio es un nutriente indispensable que debe obtenerse a través de la dieta, ya que el organismo no puede sintetizarlo. Las principales fuentes alimentarias de calcio son los productos lácteos (leche, queso, yogur), los vegetales verdes (brócoli, espinacas, col rizada), los frutos secos (almendras, nueces, pistachos) y los pescados con espinas (sardinas, anchoas, boquerones). La cantidad diaria recomendada de calcio varía según la edad, el sexo y el estado fisiológico de cada persona. En general, se recomienda consumir entre 800 y 1200 miligramos de calcio al día para mantener una buena salud ósea y prevenir enfermedades como la osteoporosis o el raquitismo.